IZÚCAR DE MATAMOROS. – Una de las iglesias más emblemáticas del municipio de Izúcar
de Matamoros, es Santo Domingo de Guzmán, la cual es considerada por los pobladores
de este lugar, una joya arquitectónica que guarda cientos de historias, leyendas,
incluso fantasmas que hay quienes dicen los han escuchado o han visto.
Este templo religioso guarda como Santo Patrono a Santo Domingo, quien cada 8 de
agosto, es festejado con una tradicional fiesta que data con más de 400 años de
antigüedad.
Paul Morales Sevilla, director de turismo del municipio izucarense, comentó que en
promedio a esta fiesta llegan cerca de 15 mil personas, toda vez que Santo Domingo
es el santo patrono de todos los barrios que conforman esta ciudad, así como de
pueblos aledaños.
Cabe mencionar que originalmente en el calendario litúrgico se celebraba a Santo
Domingo el día 4 de agosto, inclusive en algunos lugares de la región de Izúcar de
Matamoros, se sigue conservando esta fecha, pero luego del Concilio Vaticano la
festividad se movió al día 8 de agosto.
Santo Domingo es una de las tres festividades más importantes del municipio, las
otras dos corresponde a Santiago Apóstol, y Santa María de la Asunción, estas tres
son conmemoradas con diferencia de días.
La festividad de Santo Domingo inicio con la llegada de los primeros
evangelizadores, de ahí que sea la de mayor importancia para Izúcar, para los
pobladores izucarense esta fiesta es de los barrios de, y es considerada de esta
forma porque en el siglo XVII cuando se crea la parroquia de Santa María de la
Asunción se lleva a cabo una división donde los barrios son absorbidos por Santo
Domingo y son ellos quienes, asumen responsabilidades en este festejo, hasta la
fecha son estos quienes continúan organizándola.
Santo Domingo en 1904 dejo de ser parroquia y se unió a la parroquia de Santa María
de la Asunción, pero en el 2012 fue restaurada canónicamente, y se le volvió al
clero dar la categoría de parroquia a Santo Domingo, que por razones pastorales y de
administración se había perdido.
Alfonso Gil, cronista de la región, mencionó que entre los elementos característicos
de la festividad se encuentra la procesión de las imágenes, siendo cerca de 40
imágenes procedentes de barrios, colonias y comunidades de Izúcar, las que llegan a
esta festividad, el día 7 de agosto, se quedan en el lugar, y se regresan a sus
lugares de origen el día 8 tras una procesión con la que se festeja a Santo Domingo.
Detalló que las imágenes son decoradas con fruta y pan, que se cosecha y realiza de
sus lugares donde provienen.
En el caso de los barrios, el lugar que ocupan en el interior del templo tiene un
orden, pues 7 barrios se colocan de un lado y 7 del otro, en el caso de los barrios
occidentales aún se colocan de acuerdo al uso del agua, el primer barrio es el de
Santa Catarina y al último el de Santa Cruz Tecoxco, mientras que con los orientales
ese orden no existe.
Se habla de que la festividad de Santo Domingo es la más antigua de la historia del
catolicismo en Izúcar, es por ello que mucha gente viene a este municipio y también
de la región a las actividades religiosas.
José Santiago Álvarez Cabrera, párroco de Santo Domingo expresó que la festividad de
este santo patrono se ve acompañada, de los comerciantes que se colocan y forman
parte de la feria, en donde se venden artesanías, pan de feria, elotes, pozole,
tostadas entre otros productos propios de la región.
Por lo anterior, durante la visita a esta festividad, los visitantes, pueden
degustar de la gastronomía típica de los barrios de Izúcar de Matamoros, que van
desde tamales, fruta en conserva, pan, pozole, mole, enchiladas, tacos, fruta que se
produce en huertas de la zona, entre otros.
Un poco de historia y construcción
Santo Domingo de Guzmán es considerada una joya arquitectónica en Izúcar, debido a
que su proceso de construcción del templo y ex convento que se ubica a un costado
del recinto religioso, inició en el mes de marzo del año 1552, proceso dirigido por
el dominico Fray Juan de la Cruz y fue terminado en su totalidad en el año 1612,
pero desde el 1575 ya había sido abierto al público, este templo es el más antiguo
que existe actualmente en Izúcar de Matamoros y las poblaciones cercanas.
El material utilizado para su edificación son piedras, las cuales eran transportadas
por los pobladores desde los ríos o canteras de la región, y una mezcla denominada
argamasa, la cual se componía de huevos de ave crudos, nopales, cal molida, arena,
jugo de nopal y agua, pues en ese entonces aún no se conocía el cemento, parte de la
piedras que tiene este lugar fueron extraídas del rio que se asienta a escasos
metros de este lugar.
Para obtener dichos materiales, según información de Don Manuel Sánchez Cruz (QDEP),
en sus trabajos, cuenta que los frailes dominicos pedían como limosna a los
feligreses algunos de esos objetos para la mezcla y edificación del lugar, las
personas que participaban en este proceso no recibían ningún pago.
La mayoría de las construcciones de las diferentes órdenes religiosas en el
territorio mexicano eran edificadas sobre templos prehispánicos, lo cual hace pensar
en la posibilidad de que Santo Domingo de Guzmán fue construido sobre alguna
pirámide, teoría que por años ha prevalecido pero hasta el momento no se tienen
indicios reales de esto.
Los retablos del interior del Templo fueron hechos a mano con madera de cedro
tallada y estofada de oro, obra de los artesanos de la época, de todos los ex
conventos construidos en México en esa época, el de Santo Domingo es uno de los
pocos que hasta la época actual, se encuentra en buenas condiciones.
Los siniestros
El día 28 de diciembre de 1939, y 19 de septiembre el 2017, son fechas que quedaran
marcadas para Santo Domingo de Guzmán en la primera sufrió un incendio que casi lo
destruyó por completo y en la segunda el sismo provoco afectaciones al inmueble.
Según se cuenta que durante el incendio, las campanas del templo comenzaron alertar
a la población, la cual acudió para darse cuenta de lo que sucedía, al llegar al
lugar los pobladores, no podían creer lo que observaban, el templo que con tanto
orgullo habían construido estaba siendo consumido por el fuego.
El siniestro había iniciado en el Altar Mayor y se propagó por los retablos y el
Sagrario, la gente, intento sofocar el incendio, formando una cadena humana desde la
acequia que se encontraba a las orillas del terreno del templo y con cubetas en mano
acarrearon agua con la esperanza de rescatar lo que quedaba de su edificio.
Entre las esculturas que se consumieron por el fuego se encontraba una imagen de
Santo Domingo tallada a mano en madera de cedro, los pobladores lograron rescatar
algunas esculturas y pinturas.
Al final llegaron los bomberos de la ciudad de Puebla, quienes se encargaron de
sofocar por completo el siniestro, fue con la llegada del Párroco Arturo Márquez
Aguilar, quien fue muy querido en la zona, se iniciaron los trabajos de
reconstrucción de este lugar.
Otra fecha que quedara plasmada en la historia es el 19 de septiembre del 2017, el
fuerte sismo de magnitud 7,1 con epicentro en la Mixteca Poblana, dejo afectaciones
graves en el inmueble, en esta ocasión las imágenes si fueron rescatadas y hasta el
momento están resguardadas.
José Santiago Álvarez Cabrera, párroco de Santo Domingo, menciono que a poco menos
de un año, de que el templo tuviera afectaciones por el sismo, este ya está
apuntalado, siendo la fe más grande para que la fiesta se lleve a cabo de manera
tradicional, solo que ahora en el atrio de la iglesia, donde se acondiciono una
capilla, y hasta donde llegaran las diversas imágenes procedentes de barrios y
comunidades cercanas.
Finalmente, dijo que la fe es muy grande hacia Santo Domingo, lo que permitió que a
pesar de que el templo este restringido el acceso la fiesta se lleve a cabo en el
exterior como cada año, teniendo la modificación no haber juegos mecánicos en esta
ocasión, pero si los eventos culturales y los gastronómico.